lunes, 24 de febrero de 2014

Tragedia de Once: Residencia manchada con sangre

Un cartel pintado a mano, pero con todo el esmero que requiere la circunstancia, con la leyenda “102 ojos te miran”, fue el eslogan de la marcha que el sábado recordó el  segundo aniversario de la tragedia de Once. Bocinazos, alarmas de autos y un sostenido aplauso generó la curiosidad de los bañistas, que se sumaron al puñado de manifestantes que se instalaron frente a la vivienda que el empresario Mario Cirigliano (propietario del Grupo Plaza y ex apoderado de Cometrans, controlante de TBA) posee en el barrio privado Médanos.
A sabiendas de lo que iba a suceder, el sábado la enorme residencia de Cirigliano permaneció cerrada. Ese día no hubo movimiento familiar. Ni siquiera apareció el helicóptero de color bordó que utiliza el empresario. No hubo ostentaciones de los cuatriciclos, de camionetas 4x4, o las lanchas que suelen bajar. Sólo un guardia se acercó hasta los manifestantes y rogó: “Por favor no sobrepasen la cerca… está en riesgo mi fuente laboral y no quiero que me suceda lo mismo que le pasó a un compañero que ayer despidieron por mucho menos”.
En ningún momento estuvo en el pensamiento de esa gente que reclama justicia poner en riesgo el trabajo de ese hombre. Simplemente con respeto, colocando el cartel, encendiendo velas y aplaudiendo a las 19, se intentó recordar que “los ladrillos de esa casa, están manchados con sangre”.
Julio Macera, radicado en Capital Federal, pero veraneante de Necochea desde hace casi hace más de treinta años, fue quien ideó esta marcha el año pasado. “Estoy contento porque parecemos pocos, pero la realidad es que vino más gente que el año pasado. Además, vi con alegría cómo se sumaron los bañistas cuando aplaudimos”, explicó Macera. Sin dudas, esta movida irá creciendo hasta que realmente se haga justicia.
La idea surgió cuando el casi necochense leyó un titular en el que señalaba que Cirigliano encontró su lugar en el mundo en Necochea. Estas marchas año a año “demostrarán que no es su lugar en el mundo”, expresó en referencia al empresario.

Hubo 51 muertos en la denominada Tragedia de Once, y una cantidad enorme de heridos que hoy todavía sufren el horror que vivieron hace dos años. “De ellos tampoco tenemos que olvidarnos”.

jueves, 20 de febrero de 2014

Un foco de corrupción: La Liga

Viviendas, autos, plantas industriales, campos, cuadros, yates, joyas y cualquier objeto de valor se pueden convertir en parte del abanico de subastas judiciales.
Dentro del universo de las subastas participan el martillero a manera de oficial público y los postores. También suelen aparecer abogados o contadores que acompañan a estos últimos… pero no son los únicos, desde hace años surgen personajes  que, en casi todos los casos, son “el mejor postor”.
Son integrantes de “La Liga”. Siempre trabajaron a la vista de todos y hoy, aparentemente, para participar en la subasta es necesario, casi obligatorio, arreglar con estos sujetos, que se llevan un porcentaje del valor de la venta, cuando no se quedan con el inmueble u objeto que se subasta.
La impunidad con la que trabaja “La Liga” es tal que desde hace muchos años sus integrantes no cuidan mínimamente los detalles. Son conocidos en cada localidad. Por lo general “reconocidos” vecinos, casi llegando al rango de honorables en algunos casos. No tienen problema en “sacar chapa” de La Liga.
Se juntan cotidianamente en algún lugar, que puede ser la vivienda de un chatarrero, el estudio de un abogado, la oficina de algún contador, un comerciante exitoso… cualquier sitio es bueno ya que no es necesario gran espacio físico. Allí se reparten la cobertura de las operaciones en el remate de turno.
“Parece una locura, pero te están esperando en la puerta del lugar donde va a ser la subasta y se ofrecen a comprar por vos por una comisión… y si les interesa la propiedad, se la quedan”, explicó una víctima de esta maniobra.
“Si están operando para un inversor, te hacen la vida imposible para que te bajes de la subasta, inflan el precio de la propiedad hasta que quedás afuera. Y si tenés suficiente respaldo para afrontar el remate soportarás el carácter intimidante, violento y mafioso de estos personajes, que no dudan en mostrarte un arma si fuera necesario”, dijo la misma fuente, que sufrió el asedio al adquirir un inmueble en el centro de Necochea.

“La Liga” es uno más de los focos de corrupción que tiene que ver con el estado de la ciudad. Está aceptada socialmente aunque se sabe que es el negocio de unos pocos que no dudan en utilizar metodologías mafiosas para lograr el objetivo. Es otro de los grandes secretos a voces a los que, lamentablemente la comunidad hace oídos sordos. Es más, es muy difícil que los propios martilleros o agentes inmobiliarios reconozcan abiertamente el accionar de la organización. Tal vez sea hora de que todos entendamos de qué manera se puede ir cambiando la realidad en la que estamos inmersos.